¿Ya tenéis preparado el plan de reincorporación COVID-FREE?

Con la entrada de muchas comunidades autónomas en la Fase 1 y Fase 2 de la desescalada, muchas empresas están preocupadas en la vuelta al trabajo de todo el personal.

¿Cómo conseguir que los trabajadores estén seguros, qué medidas se deben aplicar, cómo organizo la desescalada?

Desde UCAE queremos daros algunas directrices para que vuestros centros de trabajo sean lugares seguros y que la vuelta a la normalidad sea bajo criterios de máxima responsabilidad.

Lo primero es tener una buena planificación de cómo el Covid19 puede afectar a la empresa en todos los ámbitos (producción, ventas, administración, atención al cliente, etc.) y, para ello, lo primero es estar bien informados sobre los últimos cambios legislativos que afecten a cada sector concreto y, a partir de ahí, tomar las decisiones que sean necesarias.

Myriam Zilles

¿Qué medidas se pueden adoptar?

Lo primero que deberíamos analizar es cuáles son los puestos de trabajo esenciales y cuáles deben ser presenciales. Es decir, la parte de la plantilla que es necesaria de forma presencial para que la producción pueda continuar. Una vez que se haya analizado cómo será la organización del trabajo, se pueden establecer una serie de recomendaciones:

Teletrabajo: siempre que sea posible será la opción más segura y se debe seguir aplicando, reduciendo progresivamente hasta la vuelta a la normalidad.

– Organización del trabajo y los horarios: para conseguir que sea seguro se deberán establecer los turnos para respetar las distancias exigidas entre trabajadores, y que progresivamente irán ampliándose hasta la vuelta a la normalidad, fijando por ejemplo porcentajes de trabajadores por departamento.

Vigilar la salud de los trabajadores, es decir si son personas sensibles frente al COVID19 o si ya han padecido la enfermedad. Así mismo, hay que tener claro que los que presenten síntomas compatibles con el virus como fiebre, tos, dificultad respiratoria o dolor de garganta, no deben acudir al centro laboral.

– Establecer los controles de temperatura al acceso al recinto y se deben establecer canales de comunicación fluidos sobre el estado de salud de los empleados, y muy importante en la medida de las posibilidades realizar un test rápido de todo el personal que se vaya a ir incorporando, ántes de su acceso al centro de trabajo.

 

Deplazamientos: se recomienda estudiar y organizar los desplazamientos en vehículos en solitario o en transportes que permitan respetar la distancia de seguridad.

Coordinarse con los proveedores y clientes, para dar conocer las medidas adoptadas y la evaluación de riesgos y, siempre que sea posible, reducir las visitas y las reuniones presenciales.

– Se deben ventilar los locales y respetar la distancia de seguridad, que debe ser de al menos 2 metros, tal y como han indicado las autoridades sanitarias.

Analizar la distribución y organización de los puestos de trabajo y, también, se debe minimizar el contacto entre personas. Puede ocurrir que en determinadas tareas no se pueda respetar la distancia, en estas circunstancias se deben buscar soluciones como barreras y entrega de EPIs.

Realizar cursos de formación a los empleados en materia de COVID-FREE, que habitualmente los servicios de prevención pueden ofrecer on line, con cargo a los fondos de la Fundación Tripartita.

En cuanto a los espacios comunes que puedan estar concurridos, como vestuarios, aseos o ascensores, se deberá limitar su uso, al igual que en los comedores, siempre que sea posible y, además, habrá que evitar la manipulación de alimentos y su consumo en los centros de trabajo, así como su desinfección.

Limpieza

Se debe incrementar la limpieza de espacios y superficies como teclados, mesas, interruptores, grifos, etc. cada jornada laboral. También será muy importante la limpieza y desinfección de aquellas superficies que se tocan con frecuencia en el lugar de trabajo y se debe garantizar la disponibilidad de agua, jabón, y papel desechable para el secado así como disponer de geles alcohólicos.